REVELACIÓN
El mar me robó la
falda.
Se replegaban las
huellas en la arena de otros días.
Vi mis piernas
desnudas andar por la ciudad.
Creí que me
perdía.
El mar robó mis
sandalias,
se enredaron mis pasos entre conchillas y algas.
Vi mis pies
desnudos pisando sobre el asfalto.
Creí que me
perdía.
Robó el mar la manta que cubría mi vergüenza.
Creí que me perdía –desnuda- frente a su indiferencia.
Salvaje y bravo, lame mis pies como un animal querido.
Sentada junto a él me encuentro y me recorro.
Puedo verme ahora que el mar me ha quitado los vestidos.
ViNuCa. Las Grutas, 13 de marzo de 2019
No hay comentarios.:
Publicar un comentario